El amor negativo
Hoy inspirada por una sesión de terapia quiero hablarte brevemente sobre el “amor negativo”.
Resulta que en el núcleo familiar donde crecemos empezamos a hacernos una primera “idea de la vida” i asociamos conductas al amor que no lo son:
Al ser niños (sin la capacidad cognitiva desarrollada plenamente) no podemos filtrar i diferenciar claramente el amor del amor negativo.
Se entiende como amor negativo aquel amor que impone condiciones, o que exige, en definitiva conductas que más que nutrir dañan...
Así aprendemos que complacer al otro olvidándonos de nosotros mismos y lo que queremos en nombre del amor.
Nos dedicamos a salvar al otro invalidándole en nombre del amor.
Le decimos al otro lo que tiene que hacer en lugar de escuchar que es lo que siente y quiere...
Chantajeamos emocionalmente para obtener lo que queremos en lugar de pedir claramente.
Te quiero si haces esto y te dejo de querer si haces aquello...
Como te quiero te retengo y no te dejo abrir las alas...
Como eres mio/a te maltrato...
Así un largo de etcéteras...
cuando empecé en el mundo de la terapia Anna Ma Medina (kinesióloga) utilizó un día una metáfora que me pareció muy clara y acertada:
El amor no es como una mano cerrada, sino como una mano abierta:
Una mano cerrada, agarra, quiere dominar, exige, no suelta ni da permiso a que se entre ni a que se salga...
Una mano abierta en la que dejas entrar al otro (poniendo los límites sanos necesarias, claro) y también le dejas marchar libremente...
Desde mi punto de vista la clave en muchos procesos terapéuticos es justamente empezar a diferenciar el amor de lo que no lo es...
¿Y tu que opinas? ¿Es algo conocido por ti?